En la noche del miércoles, el presidente Javier Milei confirmo lo que sospechaba sobre su relación con la vicepresidenta, Victoria Villaruel, quien “está más cerca del círculo rojo, de lo que ella llama la alta política, y lo que nosotros llamamos la casta“. 

En la entrevista con el periodista de LN+ Esteban Trebucq, el presidente reveló que Villaruel “decidió no participar más de las reuniones de Gabinete” y que su relación es meramente institucional ya que “es lo que se necesita para cumplir nuestros roles”.

“No tiene ningún tipo de injerencia en la toma de decisiones” afirmó Milei sobre su vicepresidenta.  Asimismo, durante la charla, el presidente se refirió a la salida de Diana Mondino de su puesto de canciller, “tarde 30 minutos en echarla”.

En el trascurso de la entrevista, Milei elogio su gestión por haber bajado la inflación, los niveles de desempleo y de pobreza y elevar el salario promedio a 1300 dólares. También elogio a su hermana, la secretaria Karina Milei, al decir que “la supuesta pastelera o repostera, como si eso fuera un delito, en seis meses armó un partido. Mirá donde nos puso la repostera”.

Aunque aseguró que no gobierna con las encuestas, el presidente se refirió al conflicto universitario basándose puramente en ellas, “en el tema universitario, nadie hubiera tomado mi posición. La opinión pública estaba 90 a 10 a favor de las universidades. La primera marcha fueron 250000 y la segunda fueron 60000. Nosotros siempre habíamos dicho que la intención no era arancelarlas, sino auditarlas. La discusión hoy está 60 a 40 a favor de las universidades y cuando meter en las auditorías 60 a 40”.

En el contexto de las elecciones legislativas del próximo año, aseguro que con el Pro “tenemos un excelente diálogo, tenemos que caminar con el mismo rumbo porque el enemigo es el mismo, los colectivistas que odian el cambio. Puede tener la cara de Néstor, Cristina o Massa. Si vos querés lograr que esto sea permanente, tenés que tener tres patas: económica, política y cultural”.