Como cada 2 de abril, se conmemora un nuevo año del Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas, una fecha de suma importancia para el país para recordar a los compatriotas que dieron la vida defendiendo el territorio usurpado por Inglaterra.

El conflicto bélico duró alrededor de dos meses y medio, y tuvo resultados contundentemente trágicos para la Argentina: 649 soldados muertos en batalla y más de 500 suicidios motivados por secuelas y traumas de posguerra.

Por parte de las fuerzas armadas del país, estos no eran más que simples jóvenes inexpertos que fueron alistados de forma obligatoria y mantenidos de forma precaria durante los meses de guerra.

Es por eso es que en el año 2000 se decidió por medio del congreso establecer la fecha anteriormente mencionada como feriado nacional para ratificar el reclamo permanente por la soberanía nacional en las islas Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur y recordar a estas víctimas de la dictadura militar.

ROL DE LA PRENSA

Una vez terminada la guerra los jóvenes se encontraron con una sociedad desinformada y con un gobierno que sentencio el hecho al olvido y silencio a través del proceso de “Desmalvinización”.

Esto ocurrió a través de la censura y noticias falsas que los medios emitían a la población para así influir en su pensamiento.

Pero esto era un hecho habitual de la época ya que la relación entre la prensa y el gobierno durante la dictadura militar tuvo sus características particulares a lo largo de los siete años que duró el régimen.

El gobierno militar había empleado mecanismos de censura con el objetivo de limitar el contenido que era considerado subversivo.

Sin embargo, poco antes de que comenzara el conflicto bélico en Malvinas, algunos medios comenzaron a mostrar sus dudas con respecto al gobierno militar. Había problemas económicos que eran difíciles de manejar y empezaba a cambiar el la idea de favorecer a esta manipulación de información.